Cuando se necesita instalar un toldo es necesario ver las diferentes opciones que se adaptan a nuestras necesidades de espacio, funcionalidad y estética, una de las opciones que se ha convertido en tendencia son los toldos cofre que cuentan con un sistema de autoprotección para los brazos mecánicos y la lona , lo que permite que al recoger el toldo éstos queden ocultos dentro de un cajetín o cofre metálico.
Lo que garantiza una mayor durabilidad del toldo en su conjunto, ya que luego de ser recogido no queda expuesto a los agentes medioambientales, así el toldo se conserva en perfectas condiciones durante mucho más tiempo, además este tipo de toldos necesita de un mantenimiento menos periódico que otros modelos.
El mecanismo interno del cofre hace que la lona permanezca en todo momento tensada, lo que evita que se arrugue o se formen dobleces que luego crean zonas que se ven afectadas por la lluvia, la humedad y el viento; los toldos cofre pueden ser motorizados en el momento que se desee, incluso pueden ser automatizados con diversos tipos de sensores lo que los hace sumamente funcionales.
El aspecto estético es otra de sus ventajas, ya que al estar recogidos no se ven ni los mecanismo de sujeción, ni la tela enrollada, minimizando todo impacto visual, por lo que son ideales para establecimientos comerciales ya que restan visibilidad a ventanales o escaparates, el cofre metálico puede ser pintado del color que se desee para integrarlo a la decoración de la fachada donde será instalado.
Gracias su excelente funcionalidad y su comprobada durabilidad los toldos cofre se han convertido en una solución ideal en cuanto a protección solar para locales comerciales.